El consejero de Turismo y Comercio, Rafael Rodríguez, entregó hoy el diploma de Puntos de Interés Artesanal de Andalucía a dos talleres del centro histórico de la capital malagueña. Concretamente, visitó las sedes de la empresa de vidriera artística Viarca y de Bordados Juan Rosén, las dos primeras de la provincia que han logrado este reconocimiento autonómico.
Rafael Rodríguez incidió en la relevancia de la artesanía en el mantenimiento y recuperación del patrimonio histórico-artístico andaluz y subrayó que constituye una actividad productiva de «relevancia creciente por ser un potente generador de empleo, poseer un elevado valor etnológico, al tener un fuerte arraigo en la historia de cada uno de los territorios, y establecer sinergias con otros sectores económicos, de manera muy especial con el turismo».
En este sentido, destacó la pujanza del sector en la provincia de Málaga, tal como atestiguan los datos del Registro de Artesanos de Andalucía. Así, recordó que hay inscritos 100 artesanos, 12 empresas, 6 asociaciones, 4 maestros artesanos y 26 oficios, entre los que destacan los de tejería y ladrillería, bisutería, cerámica, marroquinería, vidriera artística y modistería. Igualmente, los municipios con más representación son Vélez-Málaga, única Zona de Interés Artesanal declarada en la provincia, y la propia capital.
Además, se refirió a “la singularidad y la tradición” de la actividad de las dos empresas artesanas reconocidas hoy, que, por su ubicación en pleno centro histórico de la capital malagueña, se encuentran inscritas en el Catálogo del Patrimonio Andaluz como Bien de Interés Cultural con la categoría de conjunto histórico.
La empresa Viarca, del maestro artesano Alberto Cascón, cuenta con dos talleres en la ciudad y sobresale por haber realizado numerosos trabajos de rehabilitación de edificios históricos y monumentos, como la restauración de las vidrieras de la Catedral de Málaga o de las que integran la colección del Museo del Vidrio de la ciudad.
Por su parte, el taller Bordados Juan Rosén, que lleva el nombre del maestro artesano que lo fundó hace más de 38 años, ha hecho posible la potenciación y recuperación de este oficio y se ha mantenido como referente en el bordado de oro realizando trabajos sobre todo para las cofradías que procesionan en Semana Santa dentro y fuera de Andalucía.
Hasta la fecha, la Consejería de Turismo y Comercio ha declarado nueve Puntos de Interés Artesanal. Junto con los dos talleres en Málaga, cuentan con esta distinción tres en Huelva (José Carlos Escobar, dedicado a la cerámica en Nerva; José Antonio González, de cerámica en Campofrío; y Ana Bella Cortés, estampación textil en Lepe) y cuatro en Jaén (los de alfarería de Juan Pablo Martínez Muñoz, Juan Pablo Martínez Sánchez y Melchor Martínez , y el de forja y herrería de José Garrido, todos ellos en Úbeda).
Orden reguladora
Las Zonas y Puntos de Interés Artesanal están regulados en una orden que detalla el procedimiento, revisión y revocación, y el distintivo para su identificación. Las declaraciones identifican tanto aquellas áreas que ofrecen una mayor concentración de talleres que guardan una proximidad geográfica determinada, como los propios locales que presentan características homogéneas de producción.
Los locales y talleres que obtienen este distintivo pueden aparecer en las publicaciones y guías oficiales de artesanía y turismo que edite la Administración autonómica, así como participar en ferias y otros encuentros que organice la Consejería con el objetivo de la promoción y mejora de la comercialización de los productos artesanales en el ámbito de la comunidad.
Igualmente, esta declaración constituye el paso previo para la posterior puesta en marcha de otras medidas de apoyo y de colaboración con los organismos competentes en materia de turismo, así como para la vinculación de la promoción en estas áreas y su incorporación a las futuras Rutas Artesanales de Andalucía, sobre las que trabaja la Consejería de Turismo y Comercio.